El perverso narcisista: una relación dolorosa


El perverso narcisista: una relación dolorosa

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Relación tóxica: el perverso narcisita

Hay personas que tienen facilidad para relacionarse con otros, tienen con un magnetismo especial, que hacen que inicialmente todas las personas a las que se acercan se sientan atraídos y automáticamente se ganan la categoría de “cercanos y confiables”.
Sin embargo, a medida que va a avanzando la relación, hay algo en esas mismas personas que hace que poco a poco vayas sintiendo incongruencias y percibas que no te terminas de sentir bien aunque no sabes por qué. En la relación hay cosas que te hacen sentir increíblemente bien, y sin embargo hay detalles casi imperceptibles que en condiciones normales te harían sentir automáticamente las señales de alarma, y pasas completamente por alto.
Si reconoces en la siguiente descripción estas características, ponte alerta, ya que te encuentras relacionándote con un perfil de persona que acabará desgastándote psicológica, emocional, y muy probablemente, económicamente: Se trata de los perversos narcisistas.

mascara perverso narcisista

¿Qué caracteriza a un perverso narcisita?:

Encanto superficial. Saben captar a las personas y analizar sus necesidades, de modo que les resulta relativamente sencillo captar tus debilidades dándote inicialmente todo aquello que te hace sentir bien: serán tus mejores amigos, la relación de pareja perfecta, los mejores amantes… hasta que la relación contigo deje de resultarles fructífera, la cual cortarán con una frialdad que te sorprenderá, o seas tú el que te de des cuenta y decidas terminar la relación y poner la mayor distancia posible.
– Son parásitos emocionales: Buscan nutrirse de las emociones que envidian en los otros, y destruir esas virtudes, por los que atraerán a personas alegres, nobles… a las que poco a poco irán aislando y caerán por la dinámica de la relación en depresión, ansiedad…
Muy manipuladores, analizan la situación y a las personas para conseguir todo aquello que necesitan.
– Son personas que se han mantenido en una estructura infantil en la que piensan que los demás son los responsables de satisfacer mis necesidades, llegando en ocasiones a no reconocer ni la necesidad de trabajar para su propia autonomía.
– Está al límite del psicópata. Son personas frías y que no tienen ningún escrúpulo a la hora de aprovecharse de la confianza que la gente, carece de empatía real, ya que sólo reconoce las necesidad del otro que a él le resulten beneficiosas.

manipuladores

Otras características del perverso narcisista:

– La relación se caracteriza por una primera fase de seducción, en la que te dirán y harán exactamente aquello que necesites oír, y después, incapaces de mantener esa imagen con el tiempo, irán trasladando en ti el malestar que realmente siente consigo mismo (del cual ni siquiera es consciente) provocando conflictos, peleas, acusaciones… que provocan en la víctima la necesidad de arreglar la situación y ver qué es lo que pueden hacer para que la relación vuelva a ser como antes. El perverso narcisista traslada sus angustias a la persona elegida haciendo que sea éste el que porte el malestar.
Toleran mal la frustración y cuando las cosas no salen como esperaban aparece “la ira narcisista”.
Se aburren con facilidad, necesitan continuamente nuevos estímulos y motivaciones.
– Tienen una alta sexualidad, y aunque tengan relaciones de pareja, ante su incapacidad de compromiso y su pensamiento de estar por encima de cualquier tipo de norma las infidelidades serán algo habitual en la pareja. Tratarán de evitar cualquier rastro y acusarán a su pareja de estar inventándose o exagerando la situación de la que les acusa.

ira narcisista

¿Cómo te influye la relación con el perverso narcisista?

La relación que se genera con este tipo de personas es una relación de dependencia: sé que en el fondo no es algo bueno para mí, pero me resulta muy difícil romper la relación». Es como si existiera una “necesidad”. Las emociones que se viven en este tipo de relación son muy intensas y desgastantes.

Las personas que han tenido una relación con un perverso narcisista, acaban completamente exhaustas y con la autoestima dañada, ya que han sido víctimas de un maltrato muy sutil del que ni siquiera eran conscientes.

Te sentirás confundido (no entenderás cómo es posible que aquella persona que parecía tan maravillosa se vaya esfumando y vaya apareciendo otra completamente diferente y que te hace daño sin el menor índice de culpabilidad) con miedo, tristeza, rabia, utilizado, humillado, sensación de injusticia e impotencia…  Pueden aparecer síntomas de ansiedad y depresión.

Por suerte, con ayuda de la terapia, amigos y familiares, que probablemente eran mucho más conscientes de que “no era oro aquello que relucía”, consiguen recuperar su autoestima y su dignidad y mantener a estas personas a la distancia que les corresponde: siempre que sea posible, lo más lejos posible.
Si no tienes ningún tipo de vínculo familiar, lo mejor es no contestar llamadas, ni mails, ni mensajes en caso de que en algún momento trate de volver a ponerse en contacto contigo ya que tratará de volver a hacer que caigas en sus redes. Si por el contrario, te es imposible hacer esto porque tenéis hijos en común o es parte de tu familia, hay que mantener la distancia y ser muy firme en los límites ante sus posibles manipulaciones.
Si crees que puedas estar en un tipo de relación así, no dudes en pedir ayuda.

«El perverso narcisista, una relación dolorosa», por Almudena de Pablo
almudena@escuchartepsicologia.com  646 333 640
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